miércoles, 3 de octubre de 2012

MANCERA DE ABAJO

APUNTES SOBRE MANCERA DE ABAJO
El pueblo se halla ubicado en la ladera de un valle disimétrico, más inclinada la ladera Noreste, poco profundo, con una orientación Suroeste, resguardada por tanto de los fríos vientos del Noreste. En tierras de transición entre los campos cerealistas del norte y las dehesas de más al sur, preámbulo de la Sierra de Ávila, a 895 m. de altura
Es bordeado el pueblo por el Suroeste por el río Zamplón, de escaso caudal y con fuerte estiaje, en su último tramo antes de su unión con el Almar en Bóveda.
El ábside de la iglesia
A pesar de que en poblaciones cercanas hay rastros de la ocupación humana de la zona desde el paleolítico hasta la cultura vetona, las primeras huellas humanas en el pueblo corresponden a la época romana (S. II A.C.), hay un plato ó tapadera sigillata anaranjada estampillada (cerámica grabada) encontrada en “Las Eras”, y hay constancia de la existencia de un sepulcro romano en los alrededores de la actual iglesia. Sabemos ciencia cierta que en Mancera de Arriba existió una importante villa romana, posiblemente del dueño de las minas de plata y plomo de San García. ( Aprovechamos para denunciar el abandono y la dejadez de las instituciones que año a año van dejando que el mosaico de Mancera de Arriba siga destruyéndose al arar la tierra que lo cubre). No obstante es lógico suponer la ocupación del pueblo anterior a la época romana, por contar con condiciones óptimas para la creación de un asentamiento humano.
Debido a la invasión musulmana casi no contamos con documentación hasta los libros parroquiales de los siglos XV y XVI, sabemos que en 1205 forma con otras 33 aldeas el cabildo Rialmar, perteneciente a la diócesis de Ávila. Las condiciones para recibir tierras eran la de establecer casa, se cultiven tierras y se planten viñas.
El palacio
Hay constancia de que en 1498 D. Pedro Álvarez de Toledo estaba construyendo el palacio a través de una carta enviada por los Reyes Católicos al corregidor de Madrigal. Su sucesor fue D. Juan Álvarez de Toledo (hermano de D. Fernando Álvarez de Toledo, el Gran Duque de Alba), cuya hija María de Toledo y Rojas se casó con D. Diego de Colón (hijo de Cristóbal Colón). Éstos y sus descendientes fueron virreyes en la Republica Dominicana, Perú y México. Esta es la razón del parecido entre el palacio de Mancera y el de Sto. Domingo, que a su vez sirvió de inspiración a otros palacios de Sudamérica.
Ruinas del palacio
El palacio es de planta rectangular, con pocas ventanas y de pequeñas dimensiones, en piedra, de dos plantas… Tiene en su parte posterior un molino que se servía de un canal para obtener el agua del cercano río, mediante un canal todavía visible.
El sucesor de D. Juan fue D. Luis de Toledo, del cual nos habla Santa Teresa de Jesús en su libro de fundaciones. D. Luis cedió los terrenos para la construcción del convento, el segundo de los Carmelitas descalzos, ya que el de Duruelo se había quedado pequeño. El 11 de Junio de 1570 se instalan en Mancera los frailes con San Juan de la Cruz entre ellos. El Santo estuvo poco tiempo allí, y los Carmelitas abandonaron el convento por insalubridad en 1600, algunos murieron de paludismo. Tras 5 o 6 años lo ocuparon los Franciscanos hasta la desamortización de 1834. Hubo algún momento en que existió otro convento en lugar donde hoy existe una panera y un arco rebajado entre las calles según nos dirigimos al convento En 1944 la Santa Madre Maravillas traslado a parte de la comunidad de monjas de Duruelo al reformado convento de Mancera, que persiste hasta la actualidad.
El convento
D. Juan de Toledo estuvo en los tercios de Flandes y desde allí envió una imagen de la Virgen del Rosario, patrona de la localidad. Santa Teresa nos dice que D. Luis construyo la iglesia para alojar dicha imagen. Suponemos que existía una iglesia más antigua en el mismo lugar y posiblemente el actual ábside de estilo románico formara parte de ella. De dimensiones reducidas puede parecernos románica pero en su interior encontramos que los arcos que separan las naves y las columnas son góticas. Estuvo consagrada a S. Cristóbal hasta 1895 pero actualmente es a la virgen del Rosario. Nada sabemos sobre la imagen enviada desde Flandes, si se perdió o si se trata de un cuadro que hay en uno de los altares (antiguamente imagen también podía ser pintura). Existe la leyenda de que entre el palacio y el convento hay un pasadizo que los unía y que es allí donde se encuentra la imagen de la virgen.
La iglesia
La plaza Mayor es un gran rectángulo con el ayuntamiento (construcción de 1530) casi en frente, sus grandes dimensiones se pueden deber a que aquí se alistaban las tropas que se enrolaban para los tercios de Flandes y posteriormente para América, y la plaza serviría para los adiestramientos.
El ayuntamiento
Por último, durante la guerra de La Independencia el pueblo fue saqueado por las tropas francesas en la noche del 12 al 13 noviembre de 1812.